El huracán Otis, que tocó tierra en las costas de Acapulco, Guerrero, el pasado 25 de octubre, ha dejado una devastación sin precedentes en la región. Las estimaciones apuntan a que será uno de los desastres naturales más costosos en la historia de México.
Costo humano y económico del huracán Otis
De acuerdo con proyecciones de Moody’s RMS, las pérdidas aseguradas en el mercado privado a causa del fenómeno natural podrían situarse entre los 2,500 y 4,500 millones de dólares. Esta cifra equivale a un promedio de 35 dólares por habitante de México.
Sin embargo, si la cifra se divide únicamente entre los damnificados, alrededor del 1% de la población, el costo por habitante se dispara hasta los 300 dólares. Esto significa que, en promedio, cada persona afectada por el huracán Otis perdió un valor equivalente a cinco salarios mínimos mensuales.
Las afectaciones económicas pudieron ser mayores, pero algunos edificios lograron evitar daños significativos. Algunas edificaciones contaban con infraestructura que les permitía evitar daños provocados por terremotos; sin embargo, no estaban prevenidos contra huracanes pese a ubicarse en una costa.
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Hasta el momento sólo unos cuantos establecimientos han logrado reabrir sus puertas, situación que golpea duramente a una economía que depende del turismo y no está operando al 100% en temporada vacacional.
Conclusión
El huracán Otis ha dejado una huella profunda en México. Las pérdidas económicas y humanas son incalculables, y el proceso de reconstrucción será largo y costoso. Es importante que las autoridades tomen medidas para mitigar los efectos de los fenómenos naturales, como el fortalecimiento de las infraestructuras y la educación sobre la prevención de desastres.