Existen muchos mitos sobre la protección contra huracanes, y creerlos puede poner tu propiedad en riesgo. Aquí aclaramos los errores más repetidos para que tomes decisiones informadas.

Mito 1: “Con cinta adhesiva la ventana aguanta.”

Falso. La cinta no evita que el vidrio estalle; solo crea pedazos más grandes que pueden causar más daño.

Mito 2: “Solo los frentes de playa necesitan protección anticiclónica.”

En Quintana Roo, incluso propiedades a 2 y 3 km del mar reciben vientos extremos. La distancia no elimina el riesgo.

Mito 3: “Los huracanes modernos se pueden predecir con exactitud.”

Se rastrean mejor, pero su intensidad puede cambiar en horas. Estar preparado siempre es la mejor estrategia.

Mito 4: “Las persianas metálicas siempre protegen más que la malla anticiclónica.”

No. Muchas mallas modernas soportan más presión y más impacto que paneles metálicos tradicionales.

Mito 5: “Una ventana reforzada ya no necesita protección.”

Aun el vidrio templado puede romperse por impacto de escombros. La protección anticiclónica externa sigue siendo indispensable.

La verdad es que la única forma confiable de proteger una casa es instalar sistemas diseñados, probados y certificados específicamente para huracanes categoría 5. Esto incluye mallas anticiclónicas, cortinas anticiclónicas y lonas de alta resistencia, acompañadas de anclajes de acero inoxidable y clips patentados.

Conocer la realidad detrás de estos mitos puede marcar la diferencia entre seguridad y pérdidas significativas durante la temporada de huracanes.